Dieciocho aspirantes de las agrupaciones Damas Grises, Juventud y Socorrismo, se sumaron con entusiasmo a ser parte de la comunidad de voluntarios más grande y solidaria del mundo: la Cruz Roja.

La ceremonia de bienvenida contó con la presencia de miembros de la Junta Directiva, colaboradores de la institución coordinadores de las agrupaciones, los aspirantes y sus familiares.

Durante su discurso, la Directora Ejecutiva, Zuleima Radi Sagbini, resaltó que cada uno de estos jóvenes “forman parte de un movimiento que trasciende fronteras, que llega a cada rincón con la esperanza de aliviar el sufrimiento y sembrar solidaridad. Su labor no solo transformará vidas, sino que también transformará las de ustedes, porque servir es crecer, aprender y construir un mundo más humano”, puntualizó la Directora.

Asimismo, Jossep Alford Mejía, coordinador de la Agrupación Juventud, expresó que “nos sentimos inmensamente contentos al dar la bienvenida a los nuevos Voluntarios de Base que se unen a ser parte de nuestro voluntariado. Su entusiasmo y compromiso fortalecen nuestra misión y nos inspiran a seguir trabajando juntos por un futuro mejor”.

También, extendió una invitación en nombre de las tres agrupaciones para que más personas se unan al voluntariado de la Cruz Roja. “Su energía y pasión son esenciales para continuar creciendo y haciendo una diferencia significativa en nuestras comunidades. Únanse a nosotros y sean parte de este increíble movimiento”, enfatizó Alford.

Queremos que más personas se unan a nosotros para seguir impactando vidas.
Jossep Alford Mejía, coordinador de Juventud

Por otro lado, Valery Borrero Ariza, quien hizo parte de los voluntarios consagrados de la agrupación Juventud, compartió que durante tres meses aproximadamente, dedicó tiempo y esfuerzo a formarse como voluntaria.

Con relación a su futuro en la institución expresó no saber con exactitud como será su crecimiento dentro de la Cruz Roja, “pero sí sé que cada paso será gratificante y enriquecedor. Estoy aquí para aportar y aprender porque si algo me ha enseñado este proceso, es que no hay mayor recompensa que el poder aliviar, aunque sea un poco, el sufrimiento de otro“ Valery Borrero.

Además, destacó la admiración que siente por la entrega de quienes forman parte de esta organización. “Me asombra la entrega absoluta de quienes conforman esta organización. Servir sin esperar nada a cambio es un acto de amor puro, y me siento profundamente inspirada para seguir este mismo camino. “